(5411) 5365 8325
Lunes a Viernes 8:30 a 13:00 y 14:00 a 18:30
Visitá nuestra sección de Atención al Cliente
En el pueblo de Birka, donde vivían los vikingos, había una tienda de regalos. A Hugo le encantaba ir allí y revolver la cesta con "Huevos de Dragón", huevos que en realidad eran piedras que se vendían como recuerdos a los turistas. Compró tres: dos muy pesados y uno extrañamente liviano, y por la noche los acomodó cerca de la estufa de sus casa.
En medio de la oscuridad y el silencio, un ruido extraño se escucho... como si un huevo hubiera empezado a descascararse.